Quise retornar a este espacio porque hoy más que nunca, estoy convencida de que podrán los cuerpos desfallecer, pero tal vez, nuestras palabras serán fortaleza para los que quedan acá; o eso precisamente es lo que sucederá con el poeta Álvaro Marín, quien hace días fue victima de la represión policial por el Paro Nacional acá en Colombia. Él, siempre será recordado con aprecio y respeto por las personas que admirábamos su trabajo. Les invito a no dejar morir sus líneas, a ser motivados por su fortaleza y a apreciar la delicadeza de su poesía.