Un instrumento musical puede cambiar una vida. En Córdoba, la escuela de acordeoneros, iniciativa que contó con el apoyo del Programa de Derechos Humanos de USAID y que se dio en el marco de “Súmate por mí” se dedica a convocar a niñas, niños y adolescentes alrededor de la música para inspirarlos a construir sus propios planes de vida y de futuro. En este cuarto episodio conocerás el proceso, a través del cual se previene el reclutamiento forzado a ritmo del vallenato y del fortalecimiento de entornos protectores para esta población.