Los protistas son unos organismos constituidos por una sola célula y son mucho más complejos que una bacteria. A través del estudio de estos seres tan escurridizos, científicas apasionadas como Michelle Leger del Instituto de Biología Evolutiva (IBE: CSIC-UPF), son capaces de entender, ni más ni menos, de dónde sale la multicelularidad de los organismos más complejos.