Los pensamientos que usurpan mi tranquilidad, me quitan el sueño y hasta me roban la calma y la alegrÃa, son pensamientos intrusivos que, como a los sentimientos parásitos, los quiero fuera y bien lejos de mi vida.
Tener pensamientos intrusivos es normal. Aparecen de manera espontánea e incontrolada. Mi recomendación es que no los conviertas en el centro de tu vida ni hagas un súper drama por ello, pero ya que sabes lo que son, analices de dónde vienen, lo trabajes y les digas: bye bye.
Y para eso es este episodio. ¿Me acompañas?