En estos tiempos tan complicados que nos toca vivir, se está creando un terreno abonado para que personajes sin escrúpulos se aprovechen de la situación.
Siempre han estado ahí, y siguen estando, pero corremos el riesgo de que, con la situación económica que nos viene encima, con el agujero negro que va a tragar durante un tiempo al mundo cultural y editorial, proliferen como insectos en busca de nueva sangre de autores incipientes.
Lo que no cambiará será su forma de abordar a los autores, de aprovechar ciertos resortes psicológicos y emocionales para que acepten propuestas que verían inconcebibles en su vida diaria, tan personal como laboral, como sería pagar por trabajar, o lo que es lo mismo, pagar por ceder el control y los derechos sobre su obra.
De todo ello hablamos en este episodio de "El escritor confinado", perdón, de "El escritor informado"