Los denominados placeres de la vida, son esas cosas que se disfrutan y se gozan con gran emoción, y que generan una sensación interna difícil de explicar con palabras. Y aunque sea lo mejor de lo mejor, forman parte de lo cotidiano y de lo que tenemos más a mano. No es necesario recibirse en Harvard para sentir placer, basta con ir a la YPF más cercana e inhalar ese olor que nos cambia el humor. Al final no era tan difícil ser feliz, ¿no?Acompañanos en este 8vo episodio, que este podcast no te deja a pata. ¡De vuelta al ruedo bebé!