La convención internacional de los derechos de las personas con discapacidad nos invita a llamar a la discapacidad asi, a secas, sin adorno, ni eufemismos. Cuando es necesario hacerlo, de lo contrario siempre será ideal llamar por el nombre primero a cualquier persona, antes de las características o condición de cada individuo. Pero que pasa realmente en la sociedad, en nuestros hogares, como nos referimos en la coridianidad a la discapacidad. Aqui un encuentro con padres de la tribu donde hablaremos de ello. Acompañanos y aprendamos juntos.