Este pasaje presenta una sección del Evangelio según San Marcos que narra el martirio de Juan el Bautista, quien fue encarcelado y luego decapitado por Herodes a petición de Herodías y su hija. La reflexión posterior compara las acciones y carácter de Juan el Bautista con los de Herodes, destacando la valentía y la adherencia a la verdad de Juan frente a la debilidad y el miedo de Herodes que lo llevaron al pecado. Finalmente, el texto invita al lector a examinar su propia vida y a defender la verdad siguiendo el ejemplo de San Juan Bautista.