Los genes implicados en el altruismo y en el egoísmo no se han identificado todavía. Para lograrlo, investigadores de la Universidad de Basilea, en Suiza, han decidido estudiar el comportamiento del insecto conocido como la tijereta europea (Forficula auricularia). Las madres de tijereta pueden aportar cuidados a sus hijos o no, lo que sugiere que el comportamiento altruista o egoísta que está regulado posiblemente por circunstancias externas. Los investigadores analizan el funcionamiento de los genes en el insecto hembra cuando se le priva de sus huevos, antes de la eclosión, lo que favorece su egoísmo, y cuando se les deja junto a ellos hasta que eclosionan, lo que favorece el comportamiento altruista. El análisis revela que hay del orden de 1.600 genes que sufren modificaciones y, entre ellos, localizaron dos que son particularmente importantes en el comportamiento de las madres. Se trata de un estudio en insectos, pero el hallazgo puede ayudar a investigar qué genes afectan al altruismo y el egoísmo en los seres humanos. Más información en https://cienciaEs.com