Fueron auténticas estrellas del momento. Sus voces provocaban un entusiasmo sin igual y su ambigüedad sexual despertaban un agudísimo interés en las damas de la época. Eran los castrati, los castrados, que durante 150 años dominaron el panorama musical. Los principales compositores les escribieron obras que ellos embellecían y adornaban con sus voces inigualables. Pero todo tenía un precio. Y el que pagaron estos castrados fue realmente alto.
Sumérgete con la Escafandra en el siglo XVIII para ver el auge de este tipo de música y conoce cómo eran y cómo vivían.
Empezamos.