En occidente la meditación se ha vinculado tradicionalmente no solo con practicas ascéticas, sino con el desarrollo de estados contemplativos vinculados a creencias religiosas en donde el individuo ejecuta una serie de técnicas para que aquietar la mente, sin embargo, en oriente bajo el desarrollo del Daitō-ryū aiki-jūjutsu (arte marcial clásico japonés), surge la noción de Fudōshin entendiendo este como un estado de integración psicofísica necesario para inducir un modo de consciencia, con el cual seria posible construir energía interna o fuerza de vida (Ki) y finalmente entonces elevar al máximo nuestro nivel de percepción. Esa elevación del nivel perceptual, junto con el incremento de la fuerza de vida o Ki, es lo que en ultima instancia posibilita la experimentación de forma estable y continua de procesos como la Experiencia Fuera del cuerpo o el desarrollo de CONCIENCIA dentro de los sueños.