Hay que agradecer a la Tristeza -un sentimiento infravalorado, por lo que duele- por todo lo que nos hace crecer, y saber abrazarla, acogerla y soltarla.
Hay que agradecer a la Tristeza -un sentimiento infravalorado, por lo que duele- por todo lo que nos hace crecer, y saber abrazarla, acogerla y soltarla.