Con la llegada de la web 2.0 y las redes sociales, los medios tradicionales han perdido el control sobre la información que le llega al ciudadano.En los últimos años, redes sociales como Twitter se han llenado de perfiles falsos o automatizados que intoxican y confunden a millones de usuarios.La desinformación y las fake news se usan para influir en las redes sociales, con el objetivo último de conseguir cambiar un determinado discurso