Esta vez no hubo drama. No hubo espacio para dudas, ni margen para las excusas. Ilia Topuria salió al octágono del UFC 317 con la furia de un huracán y la certeza de quien ya se sabe grande. En apenas dos minutos y 27 segundos, el hispano-georgiano convirtió a Charles Oliveira en el último eslabón de su cadena de destrucción, y con ello, se coronó campeón del peso ligero. Sí, Topuria lo volvió a hacer. Y lo hizo como solo lo hacen los elegidos. Un derechazo como un mazo, seguido por una izquierda que fue más por instinto que por necesidad, mandaron al brasileño a besar la lona sin respuesta. Fue un nocaut limpio, brutal, definitivo. La culminación perfecta para una racha de tres peleas en las que ha noqueado —ni más ni menos— a Alexander Volkanovski, Max Holloway y ahora a “Do Bronx”. Tres excampeones. Tres futuras leyendas. Tres nombres que, hasta hace poco, parecían invencibles. “Boom, se apagaron sus luces”, dijo Topuria, tan frío como contundente ante las preguntas de Joe Rogan al finalizar el combate. “Esto es lo que represento. El siguiente nivel de este deporte”. Y nadie lo puede discutir. #jorgeebro #iliatopuria #charlesoliveira