Hoy nos adentramos a leer el libro de Hebreos, donde se nos dice que Jesús siendo Dios, no tuvo ningún problema e despojarse de su gloria de Dios, hacerse menor que los ángeles, siendo Dios, para poder dar la vida por nosotros, y así constituirnos como sus hermanos, de la cual no se avergüenza, acompáñame.