Jesús siempre pone en prioridad nuestras necesidades, cuando hay un alineamiento espiritual con Cristo, Él jamás nos abandona y nos deja insatisfechos. Jesús SIEMPRE cubre nuestras necesidades y satisface nuestros faltantes. Esto sucede cuando nosotros estamos en sintonía con Él y estamos donde debemos estar. Veamos algunos puntos que nos ayudarán a entender cómo Jesús sacia TODAS nuestras necesidades produciendo milagros en nuestra vida.