📖Gálatas 2:11‭-‬21 RVA2015:
Pero cuando Pedro vino a Antioquía, yo me opuse a él frente a frente porque era reprensible. Pues antes que vinieran ciertas personas de parte de Jacobo, él comía con los gentiles; pero cuando llegaron, se retraía y apartaba temiendo a los de la circuncisión. Y los otros judíos participaban con él en su simulación, de tal manera que aun Bernabé fue arrastrado por la hipocresía de ellos. En cambio, cuando vi que no andaban rectamente ante la verdad del evangelio, le dije a Pedro delante de todos: “Si tú, que eres judío, vives como los gentiles y no como judío, ¿por qué obligas a los gentiles a hacerse judíos?”. Nosotros somos judíos de nacimiento y no pecadores de entre los gentiles; pero sabiendo que ningún hombre es justificado por las obras de la ley sino por medio de la fe en Jesucristo, hemos creído nosotros también en Cristo Jesús, para que seamos justificados por la fe en Cristo y no por las obras de la ley. Porque por las obras de la ley nadie será justificado. Pero si es que nosotros, procurando ser justificados en Cristo, también hemos sido hallados pecadores, ¿será por eso Cristo servidor del pecado? ¡De ninguna manera! Pues cuando edifico de nuevo las mismas cosas que derribé, demuestro que soy transgresor. Porque mediante la ley he muerto a la ley, a fin de vivir para Dios. Con Cristo he sido juntamente crucificado; y ya no vivo yo sino que Cristo vive en mí. Lo que ahora vivo en la carne, lo vivo por la fe en el Hijo de Dios quien me amó y se entregó a sí mismo por mí. No desecho la gracia de Dios; porque si la justicia fuera por medio de la ley, entonces por demás murió Cristo.
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En el segundo capítulo el apóstol Pablo escribe uno de los eventos más incómodos que un líder puede tener, y es cuando tiene que confrontar a alguien de manera directa y contundente. Pablo no solamente confrontó a los falsos maestros, también confrontó a uno de los personajes más influyentes de la iglesia y es el apóstol Pedro.
Ellos estaban cayendo en un estilo de vida de hipocresía, queriendo agradar a los judíos y a los gentiles a la misma vez, contradiciendo sus propias enseñanzas.
Pero mi enfoque en este día es cómo Pablo les explicó y les recordó que nosotros no vivimos bajo la ley, sino bajo la gracia. Ya no vivimos bajo la ley de Moisés, sino bajo la ley de Cristo.
Pablo entendió esta revelación tan grande de que nunca vamos a ser justificados bajo la ley.
Pablo, que antes era judío y practicante de la ley, ahora bajo la ley de Cristo, disfrutó y enseñó con pasión la grandeza de la gracia de Dios, pues es la única manera de que el ser humano puede alcanzar el verdadero perdón de sus pecados y tener un verdadero encuentro con Dios, sin necesidad de practicar leyes extras que muchas veces no tenemos las fuerzas de practicar.
Y esa es la razón por la cual el apóstol Pablo era tan apasionado con estar bajo la gracia de Jesucristo, y él escribe esta declaración que es uno de mis versos favoritos: "Ya no vivo yo sino que Cristo vive en mí"; o sea, ya no tomo mis propias decisiones, sino que Dios controla ahora mi vida.
"Lo que ahora vivo en la carne, lo vivo por la fe en el Hijo de Dios"; o sea, reconozco que esta vida en la tierra la viviré en victoria siempre y cuando mantenga mi confianza en el Señor.
"quien me amó y se entregó a sí mismo por mí"; o sea, Cristo se dio como sacrificio y se negó a sí mismo para alcanzarme.

Recuerda que ser seguidor de Cristo no es una tortura o una carga pesada; al contrario, es la forma de vivir en libertad plena y de forma liviana.

Espero que esto sea tu declaración de vida y así tomar las mejores decisiones para tu hogar, como esposo/a, padres, como empresarios o empleados, y como servidores en tu congregación.

Que el señor escuche tu oración y que vivas una vida plena en Cristo Jesús. 😇

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