Esta práctica contiene una serie de herramientas de atención plena centrada en el cuerpo y en la respiración, junto con una constante invitación a que, desde la amabilidad podamos acompañarnos en momentos difíciles.

Esta práctica nos puede ser útil para cuando nos sentimos sobrecargados o desbordados por situaciones difíciles. En pocos minutos podemos calmarnos para continuar afrontando el momento desafiante que se nos presente.