El yoga se ha convertido en el oxígeno del alma moderna que vive a toda velocidad por el ritmo de la vida cotidiana. Sus bondades recorren todo el mundo y cada vez hay más maestros que enseñan la disciplina
El yoga se ha convertido en el oxígeno del alma moderna que vive a toda velocidad por el ritmo de la vida cotidiana. Sus bondades recorren todo el mundo y cada vez hay más maestros que enseñan la disciplina