La T.A.E. es un concepto que estamos acostumbrados a escuchar en los anuncios de los bancos. Es una herramienta fundamental para poder comparar entre distintos productos financieros. Indica cuánto tendremos que pagar de interés, incluyendo las comisiones, en el caso de un crédito y, en caso de un depósito, qué remuneración nos dará el banco por dejarle nuestro dinero.