Un sentimiento predominante de la vida contemporánea es que hay que atender muchos asuntos, terminar muchas cosas, empezar, archivar, leer, solicitar, cancelar, organizar, enviar correos, ordenar, recordar, comprobar o tirar a la papelera.
Es una combinación perfecta para el estrés. Y no es algo que pueda desaparecer fácilmente.