El cierre de ciclos

Aprender a dejar ir en cada ciclo, lo que pertenece y es propio de ese tránsito o momento incluyendo creencias, hábitos, principios políticos.

La mayoría de seres humanos tenemos dificultades para concluir ciclos que ya deberían estar cerrados, ya que el miedo a lo desconocido, a la novedad o a la incertidumbre está anclado en nuestra naturaleza.

Y nos aferramos a vivir con el sentido emocional de estar seguros y protegidos esto retrasa y mucho el avance hacia etapas nuevas, con nuevas personas, experiencias y tan satisfactorias como la anterior etapa.

Al igual que sucede con un grifo que no se cierra bien, cuando no concluimos definitivamente y de manera consciente un ciclo y lo dejamos atrás, podemos seguir arrastrando cosas que nos afectan, llegando a un estado de estancamiento, lo cual nos impide avanzar hacia adelante en nuestras vidas.