El rancho Izaguirre, en Teuchitlán, Jalisco, se ha convertido en un caso de atención especial. Ayer, la Fiscalía General de la República reveló graves omisiones en la investigación estatal, señalando que no se protegió el sitio ni se realizaron peritajes clave. Aún no se confirma si el lugar era un centro de exterminio, pero la FGR exige con urgencia todos los expedientes.