La historia cuenta que Enrique Santos Discépolo tardó tres años en cumplir con su promesa al compositor Mariano Mores, pero vaya si su devolución fue valiosa: la letra que escribió para la música que el pianista le había compartido se convirtió hace ahora ochenta años en uno de los tangos más importantes de todos los tiempos. Esta es la crónica de cómo Santos Discépolo estuvo diez días encerrado en una habitación, en un período de mucha tristeza en su vida, en 1943, para escribir la magistral letra de "Uno", una especie de manual de su filosofía derrotista porteña.Idea y conducción: Carlos Polimeni – Producción: Fabiana García – Edición: Gonzalo Maria – Diseño de portada: Jazmín Guzman