01.11.2016 - By
Los clientes no compran productos o servicios, compran la confianza de que esos productos o servicios les acercarán un poco más a la felicidad. Esa confianza se fundamenta en la reputación de la marca, en la proyección de valores tangibles e intangibles que coinciden con los de sus clientes y que se realiza a través de la Comunicación corporativa y del Marketing. Esos valores determinan cómo la empresa hace lo que hace y se instalan en el ADN de la empresa, representando el posicionamiento con el que se construye la arquitectura de la marca y que será determinante para el éxito del proyecto empresarial.
¿Comprendes ahora por qué es fundamental el proceso de construcción de la marca?