La Inquisición Española, también conocida como Tribunal del Santo Oficio de la Inquisición, fue una institución fundada en 1478 por los Reyes Católicos con el objetivo de mantener la ortodoxia católica en sus reinos.
Características:
Dependencia: Dependia directamente de la Corona española, a diferencia de la Inquisición medieval que estaba bajo control papal.
Objetivo: Perseguir y castigar a los herejes, conversos de judaísmo e islam, protestantes, brujas y otros considerados enemigos de la fe.
Métodos: Utilizaba métodos coercitivos como la tortura para obtener confesiones y condenas.
Tribunales: Se establecieron tribunales en diferentes ciudades de España y sus territorios.
Consecuencias: Miles de personas fueron procesadas, muchas de ellas condenadas a la muerte en la hoguera.
Controversia:
La Inquisición Española ha sido objeto de mucha controversia a lo largo de la historia. Se le critica por:
Su crueldad y represión.
Su violación de los derechos humanos.
Su impacto negativo en la cultura y el desarrollo científico de España.
Legado:
La Inquisición Española dejó un legado de miedo, intolerancia y fanatismo que aún pervive en la memoria colectiva española.