El mal humor es una locura que nos puede llevar al límite, aun como creyentes podemos sucumbir a una ira irrisoria, que nos puede dejar huellas y no propiamente positivas.
El mal humor es una locura que nos puede llevar al límite, aun como creyentes podemos sucumbir a una ira irrisoria, que nos puede dejar huellas y no propiamente positivas.