La música puede ser de gran alcance. Los estudios han demostrado la música puede reducir la agitación y mejorar los problemas de comportamiento que son comunes en las medias etapas de la enfermedad. Incluso a finales de los estadios de la enfermedad de Alzheimer, una persona puede ser capaz de aprovechar un latido o cantar letra de una canción desde la infancia. La música proporciona una manera de conectar, incluso después de la comunicación verbal ha vuelto difícil.