Durante la temporada de calor, el riesgo de deshidratación aumenta significativamente debido a las altas temperaturas, la exposición al sol y la pérdida acelerada de líquidos.
Si no se trata a tiempo, puede llevar a complicaciones graves como golpe de calor, fallo renal o incluso la muerte.
Conducen: Alejandro Rivera y José Gabriel Ávila.