Las Sagradas Escrituras nos muestran que en el Edén había dos simientes, la de la mujer y la de la serpiente quien fue vencida por un hombre que decidió ir a la cruz por cada uno de nosotros
Las Sagradas Escrituras nos muestran que en el Edén había dos simientes, la de la mujer y la de la serpiente quien fue vencida por un hombre que decidió ir a la cruz por cada uno de nosotros