Lastimarse a sí mismo para ganar la confianza del enemigo
Generalmente las personas no se dañan a sí mismas. Por eso, es posible que una lesión real pueda disipar las dudas. Cuanto mayor sea el daño que sufres, más confianza en ti depositará tu enemigo. Aun así, la tasa de éxito no sería alta.
Lastimarse a sí mismo para ganar la confianza del enemigo
Generalmente las personas no se dañan a sí mismas. Por eso, es posible que una lesión real pueda disipar las dudas. Cuanto mayor sea el daño que sufres, más confianza en ti depositará tu enemigo. Aun así, la tasa de éxito no sería alta.