La atleta Laurel Hubbard de Nueva Zelanda fue elegida por la federación de halterofilia de ese país para competir en Tokyo 2020. La clasificación de esta mujer de 43 años se da luego de que Comité Olímpico Internacional (COI) cambiara sus reglas en 2015 permitiendo a los atletas transgénero competir como mujeres si sus niveles de testosterona están por debajo de cierto umbral.