Esta semana fuimos testigos de como la agenda politica de Joe Biden y el partido Demócrata está atada a la regulación del senado llamado filibuster, que ha sido la causa de muerte de varios proyectos legislativos. El filibuster básicamente requiere que 60 senadores voten a favor de cerrar el debate de una ley y permitir que el Senado pase a votar dicho proyecto. Leyes como H.R. 1, For The People Act, un ambicioso proyecto legislativo Demócrata que busca hacer nulas las restricciones al voto que varias legislaturas estatales dominadas por los Republicanos han aprobado, podrían quedar en la nada si el filibuster no es enmendado o eliminado.  Biden enfrenta no solo a los Republicanos que en su mayoría rechazan la agenda de Biden, sino que también tiene que lidiar con la oposición de propios como los senadores Joe Manchin de West Virginia, y de Kirsten Sinema, de Arizona, ambos representantes de estados conservadores, que están casi obligados a demostrar independencia intelectual del ala más progresista del partido Demócrata. Sin cambios en el filibuster y con una mayoría escueta como la que tienen los Demócratas, varios de los proyectos Demócratas quedarán en la nada. Pero también está la posibilidad de que con la enmienda del filibuster o con su eliminación, que los Demócratas más liberales puedan empujar proyectos legislativos que no necesariamente se alinean con la visión más moderada, centrista que tiene Biden de la politica. En las próximas semanas vamos a ver si los Demócratas deciden reventar el filibuster o seguirán intentando negociar con Republicanos obstruccionistas como McConnell.

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Creative Production: Fernando Centeno and Hernán Molina