La vida cristiana está arraigada y cimentada en el amor.
Necesitamos ser muy realistas y prácticos al aplicar el punto de Pablo aquí. Algunos vienen a la vida cristiana de una crianza donde el amor no existía.
La vida cristiana está arraigada y cimentada en el amor.
Necesitamos ser muy realistas y prácticos al aplicar el punto de Pablo aquí. Algunos vienen a la vida cristiana de una crianza donde el amor no existía.