Como cristianos debemos procurar ser buen ejemplo ante el mundo y para nosotros mismos, debe brotar de nuestra vida los frutos del Espíritu Santo y decidir vivir una vida optimista y de fe para la gloria de Dios
Como cristianos debemos procurar ser buen ejemplo ante el mundo y para nosotros mismos, debe brotar de nuestra vida los frutos del Espíritu Santo y decidir vivir una vida optimista y de fe para la gloria de Dios