📖Romanos 4:13‭-‬25 
RVA2015

Porque la promesa a Abraham y a su descendencia, de que sería heredero del mundo, no fue dada por medio de la ley sino por medio de la justicia de la fe. Porque si los herederos son los que se basan en la ley, la fe ha sido hecha inútil y la promesa invalidada. Porque la ley produce ira; pero donde no hay ley tampoco hay transgresión. Por esto, proviene de la fe a fin de que sea según la gracia, para que la promesa sea firme para toda su descendencia. No para el que es solamente de la ley sino también para el que es de la fe de Abraham, quien es padre de todos nosotros —como está escrito: Te he puesto por padre de muchas naciones — delante de Dios, a quien él creyó, quien vivifica a los muertos y llama a las cosas que no existen como si existieran.  Abraham creyó contra toda esperanza, de modo que vino a ser padre de muchas naciones , de acuerdo con lo que le había sido dicho: Así será tu descendencia . Sin debilitarse en la fe, él tuvo muy en cuenta su cuerpo ya muerto (pues tenía casi cien años) y la matriz muerta de Sara. Pero no dudó de la promesa de Dios por falta de fe. Al contrario, fue fortalecido en su fe dando gloria a Dios, plenamente convencido de que Dios, quien había prometido, era poderoso para hacerlo. Por esta razón le fue contada por justicia .  Pero no solo para él fue escrito "que le fue contada"  sino también para nosotros (a quienes nos habría de ser contada), los que creemos en Dios que resucitó de entre los muertos a Jesús nuestro Señor, quien fue entregado por causa de nuestras transgresiones y resucitado para nuestra justificación.


➡️🎙️Abraham es llamado el padre de la fe. Dios le dio una promesa y es que en él serán benditas todas las naciones de la tierra. Lo que Pablo explica aquí es que no solo será el padre de la fe de los descendientes de sangre, o sea los judíos, sino que también la promesa de bendición será también para los que no son judíos. 
Ahora, si tú quieres recibir la bendición de Abraham debes tener la fe de Abraham el cual creyó y le fue con todo por justicia. 
Con sólo creer.
Pero no es una fe cualquiera.  Ésta Fe no es creer lo que sea sin razonamiento. Es creer reconociendo los obstáculos y las imposibilidades. Es una fe inteligente. Es una fe que evalúa el panorama y ve que humanamente es imposible alcanzar una meta pero, a la misma vez, es consciente de en quién está creyendo y quién es el que hace las cosas imposibles, posibles. 
Es la fe de alguien que está convencido 100% del Dios que hace milagros, que escucha el clamor y ve la necesidad de un corazón humilde y de ese Dios que actúa con poder. 
Abraham sabía que no podía tener un hijo porque las oportunidades ya se habían acabado. La edad avanzada de él, y el vientre de su esposa que no podía desarrollar un bebé. No lo pudo hacer cuando era joven, ahora menos de avanzada edad. 
Pero Abraham creyó al Señor. Si Dios el creador lo dice pues es el momento preciso para creer que sí se puede! Él creyó lo que no se veía, creyó en contra del destino que se veía, esperanza contra esperanza, su anhelo de tener descendencia en contra del futuro del ciclo natural de la vida ya anciano con su esposa estéril.  

Cree! Sin negar que las circunstancias son difíciles, que el problema en el matrimonio es un reto grandísimo, que la condición de tu hijo o hija tendrá mucho trabajo o tomará tiempo en que pueda mejorar, pero cree. Hay promesa en el Dios que dijo que todo será posible.  

Abraham recibió su promesa años después. En ese proceso se desanimó, se equivocó, se desesperó, pero siempre guardó su fe, creció en la fe, porque nunca perdió su confianza en aquel que le dió la promesa. 

Recuerda las palabras de Jesús:
Marcos 10:27
Entonces Jesús, mirándolos, les dijo: —Para los hombres es imposible pero no para Dios. Porque para Dios todas las cosas son posibles.
Cree contra todo pronóstico. 
Te...