Me encanta subir a la montaña y llegar hasta los picos más altos pues allí todo es diferente. Entender que Dios es el creador de la maravillosa naturaleza y de todo lo que existe, lo cual nos muestran la gloria de Dios y nos dirigen hacia Él. Ninguna cosa creada merece nuestra adoración, solo Él es digno de toda adoración, gloria y honra.