Hola amigos, volvemos a encontrarnos, una vez más, en esta transitada senda de la música, una senda que nos llevara, de manera inequívoca, a la victoria en esa guerra privada que todos tenemos pendiente con la infelicidad. Y, como alguien dijo que la vida sin música, sería un error, hoy vamos a ponerle remedio con la ayuda inestimable de Brahms. Vamos a escuchar su Sinfonía núm 3 en fa mayor, opus 90, obra que el autor compuso en el verano de 1883, casi seis años después de haber terminado la Segunda Sinfonía.