“Ningún humano es ilegal” es el grabado que Marina Anaya, artista plástica, ha creado para CEAR en su lucha a favor de los derechos de las personas refugiadas. Junto a ella y Blanca de la Torre, comisaria, directora de proyectos y crítica de arte, hablamos en este encuentro sobre el papel transformador del arte como agente de cambio.