"Somos como hemos aprendido a ser, no como somos" Pindaro.
Somos seres sintientes, y como tales es importante conectar tanto con el placer como con el dolor. Dejarnos sentir lo que la vida nos invite a sentir en cada momento, aunque sea desagradable, sin defendernos ni resistirnos. Observar nuestras sensaciones corporales nos ayuda a correr el foco de atención de los pensamientos, y por ende a estar un poco más presentes en lo que estamos haciendo.