
Sign up to save your podcasts
Or
Para reconocer esta estratagema, debemos, por un lado, observar con cuidado para distinguir el objetivo real del contrincante. Por el otro, debemos corregir nuestros propios defectos, tales como la arrogancia y el gusto por la alabanza.
Para reconocer esta estratagema, debemos, por un lado, observar con cuidado para distinguir el objetivo real del contrincante. Por el otro, debemos corregir nuestros propios defectos, tales como la arrogancia y el gusto por la alabanza.