Mira hacia atrás y fíjate en lo que Dios ha hecho. Pensamos en lo que pasó, no para sacarnos del presente, sino para recordar que Él ha sido bueno y que lo será una y otra vez.
Mira hacia atrás y fíjate en lo que Dios ha hecho. Pensamos en lo que pasó, no para sacarnos del presente, sino para recordar que Él ha sido bueno y que lo será una y otra vez.