ORACIONES EN EL SALÓN DEL TRONO
17 de octubre
EL QUE ESTÁ SENTADO EN EL TRONO
Adorar al Padre no será cuestión de estar en el lugar correcto, sino con el corazón correcto. Porque Dios es Espíritu y anhela tener adoradores sinceros que lo adoren en el reino del Espíritu y en verdad.
JUAN 4:23–24
Espíritu de Dios, llévame al reino celestial, donde puedo ver al que está en el trono. Tú que estás radiante en gloria, más allá de cualquier forma de hombre, siéntate en el trono del cielo. Quiero experimentarte como lo hizo Juan en Apocalipsis. Quiero estar en la realidad del cielo, atrapado en el reino más alto del Espíritu. Anhelo contemplarte, sentado en el esplendor del reino celestial-espiritual omnipresente. Quiero contemplar al Único que resplandece como el arco iris. Así como Juan te vio por el Espíritu, ¡cuánto anhelo verte de la misma manera! Abre mis ojos, guíame y muéstrame Tu gloria. En Tu presencia solo hay majestad, solo resplandor. Revela a mi entendimiento lo que hasta ahora no he podido comprender. Soy tu siervo voluntario, Dios. Soy Tu hijo y anhelo representarte en la tierra, tal como eres. Rey de gloria, anhelo conocerte más. Amén