En este episodio de Pasión por Obedecer, hablamos sobre los beneficios de tener comunión con Dios, eso que llamamos estar en su presencia.

Tú me enseñaste a vivir como a ti te gusta, es el, es la primera declaración que en la versión La Biblia en Lenguaje Actual (LBA) encontramos del Salmo 16:11

En la versión Reina Valera 1960 dice:

“Me mostrarás la senda de la vida; En Tu presencia hay plenitud de gozo; delicias a Tu diestra para siempre”.

Pero al estudiar el pasaje y comprarlo con otras versiones para enriquecer el entendimiento de su significado lo encontré en la LBA y esto es lo que afirma de una forma muy preciosa...

"Tú me enseñaste a vivir como a ti te gusta.¡En tu presencia soy muy feliz! ¡A tu lado soy siempre dichoso!"

Para mi está versión es preciosa porque permite entender lo que más nos produce mantenernos en comunión con el Señor: agradarle, felicidad y dicha.

Para muchos esto puede sonar como a un romance sin sentido, pero no lo es. Es la manifestación del glorioso resultado que produce el estar cerca de Dios y de hacer que El sea el Centro de nuestra vida.

Cuando lleguemos a decir, Tú me enseñaste a vivir como a ti te gusta nuestros corazones rebozarán del entendimiento de cuan extraordinaria es la vida de aquel que intima con Dios.

Nada en este mundo puede darte lo que Dios y la presencia de Dios en tu vida te puede dar. No hay mayor placer que hombre o mujer alguna pueda tener en la vida que el de estar en su presencia. ¿Por qué?

Porque....

Tú me enseñaste a vivir como a ti te gusta.

¡En tu presencia soy muy feliz! ¡A tu lado soy siempre dichoso!

A disfruta el podcast de hoy y la oración de bendición en la voz del Pastor Enrique Romero Aguilar.