A pesar de que creemos tomar buenas decisiones, en muchas de las cosas claves de nuestra vida empezamos tomando decisiones malísimas, antes de darnos cuenta (si es que alguna vez lo hacemos) que debemos emplear otro sistema para tomar decisiones o el asunto será letal. Al llegar a este punto hay mucha gente que no logra recuperarse. Los cristianos solemos decirle a la gente “qué elegir” en vez de enseñarles “cómo elegir”. En esta nueva serie, estaremos hablando de las malas decisiones que tomamos, por qué, y cómo, a la luz de la Palabra, aprendemos a tomar mejores decisiones.

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