Esta semana, los Trumpublicanos confirmaron una vez más que la necesidad tiene cara de hereje. Tiraron por la borda los pocos principios que tenían, (y sabiendo que son políticos, sabemos que tenían pocos para empezar), y decidieron desplazar a Liz Cheney, quien se encargó de recordarle a todo el mundo que Biden le ganó a Trump, que no hubo fraude en la elección, y que el ex Presidente Trump incitó a la violencia que terminó con el ataque al Congreso el 6 de Enero donde murieron varias personas. Cheney se convirtió en un problema porque al no aceptar repetir la mentira de Trump, rechazó el esfuerzo del expresidente de deslegitimar la elección de Biden y su rechazo de aceptar que la mayoría de los Americanos rechazaron darle un segundo mandato. En la matemática que hacen Republicanos como Kevin McCarthy, Trump es parte indispensable de esa fórmula para ganar las elecciones de medio término en 2022. La pregunta del millón de dólares es: lograrán los Republicanos convencer a suficientes votantes (más allá de la base que siga a Trump) como para volver a controlar la Cámara de Representantes y el Senado. En este episodio, Hernán y Luis se meten de lleno en esta gresca partidaria, y como de costumbre, sus opiniones son variadas y picantes.