Mediante viento iónico, científicos del Instituto Tecnológico de Massachusetts construyeron este artefacto, el cual carece de hélices, álabes de turbina o ventiladores y no depende de combustibles fósiles.
Se espera que con la propulsión iónica, junto con sistemas de combustión convencionales sea posible, en un futuro, crear aviones de pasajeros híbridos más eficientes en combustible.