En tu vida diaria, ¿dedicas tiempo a la comunicación con Dios? ¿Cómo lo haces? Este programa reflexiona sobre esta área de comunicación, que algunas veces desatendemos, y las maneras de realizar ese diálogo con Dios.

Orar, rezar, rogar han sido nombres que se utilizan para designar la comunicación con Dios. La oración, como todo proceso de comunicación, como todo diálogo, tiene dos interlocutores: Dios y tú. Mediante la oración se contempla a Dios, se le agradece, se le pide perdón y se le solicita su bendición y ayuda.

No descuides esta área de la comunicación. Atiende tu comunicación con Dios. Él siempre está atento a responder.

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