El racismo, la discriminación y el segregacionismo han estado presentes en la historia de México, como sucedió con las comunidades de chinos establecidas en el país desde el siglo XIX y que fueron discriminadas en ciertas regiones de manera violenta y vergonzosa. Es importante que hablemos de estos evento que ocurrieron en el pasado para visibilizar que la discriminación ha existido y existe en este país, tristemente, de muchas maneras y hacia distintas comunidades. Y en tiempos de pandemia, charlamos con la historiadora Beatriz Alcubierre Moya quien ha trabajado el tema de la historia de la infancia desde distintos espacios y tiempos: en su libro, Niños de nadie (Bonilla Artigas, UAEM, 2017) nos cuenta la historia de un grupo de niñas y niños utilizados como transporte vivo de la vacuna de la viruela a principios del siglo XIX. La charla nos llevó a la reflexión sobre cómo enfrentamos en estos tiempos la pandemia a la espera de una vacuna. La discriminación hacia los migrantes en Estados Unidos se ha manifestado de muchas formas y con frecuencia en las comunidades de latinos; en los años noventa del siglo pasado, una cantante México-americana, Selena, se atrevió a trascender esas violencias y con su música, su voz y su persona, se convirtió en una figura popular que dignificó la herencia latina y su derecho a hablar (y cantar) la lengua de sus padres, a no avergonzarse por sus orígenes y, por qué no, a construir nuevas identidades nacidas de esa biculturalidad.