Sí, como la camiseta de Boca, explicó Raúl, con una paciencia que le costaba demasiado después de haberse pasado el lunes revocando paredes de una casa que jamás sería la suya.
Sí, como la camiseta de Boca, explicó Raúl, con una paciencia que le costaba demasiado después de haberse pasado el lunes revocando paredes de una casa que jamás sería la suya.